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Bienvenido a casa
"Me conformo con que me ames sólo cinco minutos, y luego cinco minutos más, y luego cinco más, y ..."
Pilar Lopez de Ayala. Bienvenido a casa
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sábado, agosto 19, 2006
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Bueno, pero de cinco en cinco no, que suena a poquito. Al menos dame quince, mujerpordios...¡que me dé tiempo a quitarme los calcetines!
Todo largo caminar empieza con un primer paso.
Aunque me ponga algo exagerado, cuando se ama cada segundo es importante, cada segundo se necesita, cada segundo se espera con ansiedad. Cuando se pide, igual, supongo.
Cuando el amor es infinito tiende a ser discontinuo. Y lo curioso es que este tipo de amor a intervalos de cinco minutos parece ser tan constante como pautado.
Y eternamente cinco minutos hasta que el tiempo se colapse en un beso como si fuese un agujaro negro absorbiendo la energía de alrededor para, en última instancia, que no exista nada... solo el beso.
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