sábado, abril 17, 2010

Abismo #3

El niño ha vuelto a entrar después de habeme hecho demasiadas preguntas. Llevo dos días esperando y rellenando instancias pero debe de haber algún problema con el registro porque aún no me permiten entrar. Después de 40 años de trabajo llego aquí y me tratan así, se me quitan las ganas de todo. Ahora podría estar en casa preparando algún viaje con Rubén ahora que no dependemos de los niños. Me dijeron que serían tan sólo unos meses y ya sé que he estado retrasándolo demasiado tiempo y que todo el mundo debe pasar por ello y que la única forma de mantener viva nuestra especie y que no afectará a mi vida ni a mis recuerdos ni a mi estado de salud. Sí, ya sé todo eso, pero me desespera estar aquí esperando como si no tuviera nada mejor que hacer.

Además, yo no soy la única culpable de haber llegado tan tarde, después del accidente cambiaron mis coordenadas y la Anfitriona decidió cambiar el destino que habían tatuado en mi muñeca, me ha costado siglos llegar hasta aquí. El niño regresa y me mira con desconfianza, incluso diría que puedo sentir cierto desagrado, para que le estoy haciendo trabajar más de lo que debería.

No puedo entrar, o eso dice, que Abismo tiene un registro duplicado y que no el Sistema no lo acepta y que no puede correr el riesgo de dejarme entrar y provovar un colapso del sistema central o algún cortocircuito que ponga en peligro toda la estructura. No me lo puedo creer, quizás pretende que me quede en esta sala de espera para siempre, que deje pasar el tiempo y que me sienta a escuchar las agujas del reloj de pared que tiene justo encima de la puerta de entrada a Abismo. Que hable con sus superiores, que le den solución, es sólo un problema burocrático, que no voy a quedarme en esta especie de limbo, que les pregunte a sus padres si hace falta.

Y el mundo estalla. El niño se ha enfadado de verdad. Lo sabía, sabía que lo que más les molestaba a estos niños es que los tratemos como tales, estaba advertida pero he perdido los nervios y ahora no entiendo nada de lo que me está diciendo. Grita, patalea y probablemente esté insultándome en su idioma. Ahora me arrepiento de no haber estudiado Abismal en el instituto, al menos sabría a qué atenerme, pero se ha marchado. Se ha marchado y me ha dejado aquí, a solas, con mi pasado y sin ningún futuro, sin amigos ni familiares que me acompañen, y de repente he vuelto a sentir aquel mismo vacío interior que experimenté después del accidente, como si me hubiese quedado sola con mi cuerpo, como si mi verdadero yo estuviese muy muy lejos de aquí, en algún lugar que no conozco. El tiempo que pasé en el hospital fue el más extraño de mi vida, no quiero volver a pasar por ahí, así que llamo al niño a gritos, me disculpo, pero ya no me oye, y yo vuelvo a pensar en aquellos cinco horribles meses, y lo único que quiero es que no me deje aquí, por favor.

Leer más...
Son tiempos difíciles para los soñadores...
Creative Commons License

Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.

Alnitak no se responsabiliza de las opiniones y comentarios vertidos por los usuarios. Cualquier sugerencia será bien recibida.


Ellos me contaron que...

Followers

  ©Template by Dicas Blogger.